Son ondas generadas neumáticamente que se aplican sobre tejidos blandos de manera superficial con una máxima penetración de 40mm. en cualquier sistema radial del mercado.

Sus aplicaciones son variadas como, por ejemplo, en las tendinosis o tendinitis tanto si esta calcificada o no, tendinopatía de hombro, rodilla o codo; en la bursitis trocantérea, en el síndrome de la fricción de la cintilla iliotibial o puntos gatillo. Esta técnica no es invasiva, muy segura, menos dolorosa y se puede realizar a nivel ambulatorio.

El equipo de ondas de choque radial que se precie está compuesto de un compresor externo de aire, una sonda radial libremente móvil que se pone en contacto con la piel mediante un gel conductor y un panel de control donde se puede cambiar la intensidad, frecuencia y número de impulsos a realizar por paciente.

Sus efectos fisiológicos, ¿cómo actúan?

Los efectos fisiológicos de la terapia de ondas de choque y su forma de acción son los siguientes: causar microscópicos efectos biológicos intersticiales y extracelulares que producen una mecanotrasducción que fomenta la regeneración de tejidos. A partir de este efecto general fisiológico se producen los siguientes efectos:

Efectos analgésicos: por destrucción de terminaciones nerviosas no melianizadas, por inhibición medular e inhibición de terminaciones nerviosas por liberación de endorfinas como por saturación de factor P.

Efectos antiinflamatorios: por degradación de los mediadores de la inflamación por hipertermia inducida.

Aumento temporal de la vascularización: por parálisis simpática inducida por las ondas de choque.

Activación de la angiogénesis o formación de nuevos vasos sanguíneos: por la rotura intraendotelial de los capilares con migración de las células endoteliales al espacio intersticial y activación del factor angiogénico.

Fragmentación de los depósitos cálcicos: este se produce por el propio efecto mecánico de las ondas sobre los depósitos cálcicos mediante fuerzas tensiles dinámicas en el propio estrato cálcico.

Neo-osteogénesis en procesos de pseudoartrosis y retardos de consolidación: el efecto fisiológico, en este caso, se produce por la estimulación osteogénica (osteonectina) por micronización osteogénica.

Por otro lado, las indicaciones específicas de la terapia de ondas de choque dependerán del tipo de tratamiento ya que pueden usarse en rehabilitación de lesiones, en urología, en dermatología y en estética.

 

A continuación, se enumeran distintas lesiones donde se recomienda la terapia de ondas de choque:

Por supuesto, tiene algunos efectos secundarios, aunque en general, es bien tolerada y presenta muy buenos resultados a largo plazo.

Los posibles efectos adversos se resumen en: hematomas subcutáneos, petequias, eritema. Por este motivo, las personas que tomen anticoagulantes no deben recibir este tipo de terapia.

Por otro lado, hay algunos estados físicos o enfermedades donde NO se recomienda la terapia por ondas de choque, como son: los procesos inflamatorios e infecciosos agudos, procesos hemorrágicos y tratamientos anticoagulantes, polineuropatías, neoplasias, enfermedades reumáticas sistémicas, fisis de crecimiento de los niños (cartílago de crecimiento) y zonas con gases como los pulmones.

La terapia sin dolor

Las ondas de choque permiten restaurar la condición patológica mediante un proceso en el que la aplicación de la técnica no es dolorosa. Las cirugías, que tradicionalmente han sido las técnicas más invasivas y utilizadas para recuperar lesiones musculares u osteoarticulares, son procedimientos dolorosos que requieren de anestesia y recuperación con ingreso hospitalario.

Por tanto, las nuevas terapias buscan aliviar el dolor, acortar el tiempo de recuperación y recuperar la funcionalidad completa de las lesiones. La terapia de ondas de choque, cuyo efecto analgésico es inmediato tras la aplicación de unos 400 pulsos, ayuda a reducir la sensibilidad y el dolor. Sin embargo, a las pocas horas puede reaparecer ya que esta es una terapia progresiva.

¿Las ondas de choque duelen? La terapia de ondas de choque es segura, nada agresiva y en la mayoría de las personas proporciona una recuperación progresiva de la lesión. El dolor al inicio del tratamiento es totalmente soportable y por su efecto analgésico este dolor va remitiendo ya en la primera sesión, a medida que se aplica el tratamiento. Siempre y cuando hablemos de las ondas de

choque de presión radial que, como se indicaba anteriormente, son menos invasivas que las focales y su acción es más suave sobre los tejidos.

Indicaciones de las ondas de choque qué dolencias tratan y efectividad

La terapia mediante ondas de choque se ha convertido en una de las mejores formas de combatir un amplio listado de dolencia físicas. Este tipo de tratamientos actúa de manera rápida, y muy beneficiosa, sobre lesiones, dolores, calcificaciones, tendinitis y una larga lista de trastornos, que incluyen la celulitis y la disfunción eréctil.

ONDAS DE CHOQUE PARA FISIOTERAPIA

El amplio campo de aplicación de técnicas fisioterapéuticas se ha beneficiado en gran medida de los avances en las técnicas de terapia de ondas de choque.
Gracias a ello, es posible multiplicar el efecto curativo en casos de contracturas, dolores musculares y daños en los ligamentos.

En un principio, las ondas provocan una erosión mecánica que provoca una mecanotrasducción en los tejidos que se revierte en un efecto biológico beneficioso para el tejido tratado. Las ondas de choque regeneran los tejidos tratados, con el consiguiente alivio de dolores, mejora del estado general y reducción del riesgo
de lesiones futuras.

ONDAS DE CHOQUE: EPICONDILITIS

Dentro del ámbito de la fisioterapia, los dolores del antebrazo y, sobre todo, de esos tendones llamados epicondíleos, resultan muy comunes entre personas que practican deporte. Gracias a las ondas de choque, la epicondilitis se trata y se cura con un alto porcentaje de éxito. El también denominado codo de tenista tiene consecuencias que pueden ir desde las molestias leves hasta casi imposibilitar cualquier movimiento o torsión de la mano, muñeca o antebrazo, debido al intenso dolor.

ONDAS DE CHOQUE PARA FASCITIS PLANTAR

El tratamiento para la inflamación de un tejido que va desde la planta del pie hasta los dedos, llamado la fascia plantar, es otra de las principales causas de que las terapias de ondas de choque se hayan extendido y generalizado. De hecho, las mejoras en los pacientes, después de varias sesiones, son notables, debido al estímulo de los tejidos que suponen las ondas de choque. Según la sociedad americana de podología el tratamiento goldstandar para la fascitis plantar es ondas de choque sumado a ejercicios excéntricos.

ONDAS DE CHOQUE PARA FASCITIS PLANTAR

El tratamiento para la inflamación de un tejido que va desde la planta del pie hasta los dedos, llamado la fascia plantar, es otra de las principales causas de que las terapias de ondas de choque se hayan extendido y generalizado. De hecho, las mejoras en los pacientes, después de varias sesiones, son notables, debido al estímulo de los tejidos que suponen las ondas de choque. Según la sociedad americana de podología el tratamiento goldstandar para la fascitis plantar es ondas de choque sumado a ejercicios excéntricos.

ONDAS DE CHOQUE PARA TENDINITIS

Cuando los tendones se inflaman, entre las consecuencias están intensos dolores y molestias. Una vez que eso se produce en un determinado paciente, hay muchas probabilidades de que le vuelva a ocurrir. Por eso, un tratamiento con ondas de choque supone una mejoría rápida y evidente en su estado, al tiempo que una estrategia de prevención ante nuevos casos.

ONDAS DE CHOQUE: DISFUNCIÓN ERÉCTIL

Gracias a la aplicación de ondas de baja intensidad directamente sobre la superficie del pene se mejora la circulación y se generan vasos sanguíneos que no existían previamente. El aumento de capacidad de este órgano para dar entrada y almacenar sangre en sus cuerpos cavernosos incrementa la facilidad para desarrollar y mantener una erección.

La técnica es totalmente indolora y habitualmente se realiza en varias sesiones de unos 15 minutos de duración. Se aplican pequeños pulsos, tanto en las zonas de la raíz del pene como en los lados del mismo. Tras este proceso, la mayoría de los pacientes experimentan una mejoría notable en su capacidad sexual.

Consulte nuestro equipo focal PiezoWave 2, recomendado para el tratamiento de la disfunción eréctil.

ONDAS DE CHOQUE: CALCIFICACIONE

Gracias a la aplicación de ondas de baja intensidad directamente sobre la superficie del pene se mejora la circulación y se generan vasos sanguíneos que no existían previamente. El aumento de capacidad de este órgano para dar entrada y almacenar sangre en sus cuerpos cavernosos incrementa la facilidad para desarrollar y mantener una erección.

La técnica es totalmente indolora y habitualmente se realiza en varias sesiones de unos 15 minutos de duración. Se aplican pequeños pulsos, tanto en las zonas de la raíz del pene como en los lados del mismo. Tras este proceso, la mayoría de los pacientes experimentan una mejoría notable en su capacidad sexual.

Consulte nuestro equipo focal PiezoWave 2, recomendado para el tratamiento de la disfunción eréctil.

ONDAS DE CHOQUE: ESPOLÓN

La terapia de ondas de choque consigue reducir los efectos dolorosos del espolón calcáneo, un crecimiento del hueso de la zona del talón. El desarrollo del espolón calcáneo se produce, en muchos casos, simultáneamente a la dolencia denominada fascitis plantar, por lo que un tratamiento de este tipo resulta doblemente efectivo.

LIBERACIÓN DE MÁS SUSTANCIA P

Una de estos neurotransmisores es la sustancia P, un mediador del dolor y un factor del crecimiento. Por una parte, la liberación de sustancia P por las ondas de choque tiene un efecto analgésico. Por otra parte, dilata los vasos sanguíneos, estimula la circulación de la sangre y contribuye a la formación de nuevo tejido óseo. El NO (óxido nítrico) también tiene un efecto vasodilatador y desempeña un papel importante en la angiogénesis.

En resumen, sabemos la razón por la que las ondas de choque, cuando se aplican donde existe dolor, producen un efecto analgésico, aumentan la circulación de la sangre y facilitan el proceso de reparación.

INHIBICIÓN DE LA ENZIMA COX-2

Al inhibir los mediadores inflamatorios como la COX-2, las ondas de choque producen un efecto antiinflamatorio.
De esta manera se reduce cualquier proceso inflamatorio.

ACTIVACIÓN DE LAS DEFENSAS CELULARES

Al contribuir a la liberación de radicales libres, las ondas de choque refuerzan los mecanismos de defensa celular endógenos del cuerpo para protegerlo contra enfermedades.

HIPERESTIMULACIÓN DE FIBRAS NERVIOSAS

Estudios científicos también han mostrado que las ondas de choques actúan de otra manera; la sobreestimulación de las fibras nerviosas bloquea el aumento del estímulo del dolor y, por tanto, intensifica el efecto analgésico
(teoría del gate control).

Beneficios de las ondas de choque en los tratamientos deportivos

Si hay indicaciones en donde las ondas de choque son especialmente eficaces es en aquellas que estén derivadas de la práctica del deporte. Porque en efecto, es un tratamiento para tratar las lesiones en los tendones y otros músculos de cuerpo, como en los casos de la epicondilitis, tendinitis, fascitis plantar y toda clase de afectaciones musculares y óseas. Los principales beneficios de estas ondas acústicas se derivan del hecho de que es un procedimiento no invasivo y que no requiere de la aplicación de ninguna clase de anestesias. Ayudando, por otro lado, a que la recuperación sea mucho más rápida al acelerarse el proceso curativo de una forma correcta. Para que, de esta manera, la rehabilitación sea más satisfactoria para los pacientes.

Además, los efectos analgésicos de las ondas de choque reducen el dolor desde el inicio del tratamiento y al ser naturales no son en absoluto susceptibles de provocar un positivo de dopping. De cualquier forma, una de las características más relevantes de su utilización se deriva del hecho de que reduce o elimina el proceso de calcificación. Por estos motivos es necesaria el uso diligente de esta terapia una vez se haya diagnosticado la lesión correctamente. Para que tenga un doble efecto sobre la incidencia orgánica. Por una parte, para la reversión de la inflamación, y por otra, para

reducir el dolor como consecuencia de sus altas repercusiones analgésicos. Hasta el punto de que generará un notable alivio en el estado de los pacientes afectados.